“En Bolivia existen dos opciones: la restauración conservadora o la profundización del proceso de cambio”
Katu Arkonada: La semana pasada se ha presentado “BoliviaLeaks, la injerencia política de Estados Unidos contra el proceso de cambio”, libro coordinado por usted que analiza 1299 cables confidenciales enviados desde la embajada de Estados Unidos en La Paz entre 2005 y 2010.
Me llama poderosamente la atención el nivel de injerencia que tenían los Estados Unidos en Bolivia antes del proceso de cambio. En la cancillería boliviana funcionaba hasta la llegada de Evo Morales una Oficina de Asuntos Especiales de la Embajada de Estados Unidos; en el Banco Central de Bolivia funcionaba una oficina del Fondo Monetario Internacional; en palacio del Gobierno, donde nos encontramos, funcionaba una unidad de CIA bajo el nombre de Unidad de Análisis de Seguridad Presidencial; y junto a la oficina del Comando en Jefe de las Fuerzas Armadas en el cuartel de Miraflores, funcionaba una oficina de enlace del Comando Sur.