Nutriendo las filas de la ultraderecha, Los arrogantes de Sahra Wagenknecht y las políticas de la identidad (I)
x Iván Carrasco Andrés
Hace apenas unas semanas, la política alemana de origen iraní de Die Linke, Sahra Wagenknecht, publicó un libro titulado Die Selbstgerechten: Mein Gegenprogramm-für Gemeinsinn und Zusammenhalt (Los arrogantes: Mi contraprograma- por el sentido común y la unión). El libro, dividido en dos partes, hace un controvertido diagnóstico de la actual situación de la izquierda en Alemania, las causas de su distanciamiento de la clase obrera y en la segunda parte propone alternativas. ¿Por qué la derecha gana adeptos cada día que pasa?, ¿tiene la izquierda alguna responsabilidad al respecto?, ¿qué cambios sociales han tenido que suceder para que se enaltezcan las diferencias particulares frente a las cuestiones de clase? Estas son algunas preguntas que guían la reflexión de la autora en su más reciente libro.
La izquierda que convirtió el ser de izquierda en un estilo de vida
Desde hace algunos años se ha abierto un discreto, casi imperceptible, pero creciente debate en la izquierda y en algunos círculos liberales sobre las políticas de la identidad[1] y su repercusión en los resultados y tendencias electorales, que han sido, en su mayoría, beneficiosos para los partidos de derecha y ultraderecha en EU, Francia, Inglaterra y Alemania, así como la influencia que dichos planteamientos han tenido progresivamente en las praxis de las “nuevas izquierdas”. Sahra Wagenknecht pone sobre la mesa y señala incisivamente una serie de elementos para la discusión urgente y actual sobre los nuevos derroteros que han tomado las izquierdas a nivel mundial. Wagenknecht ha sido atacada por algunos miembros de su mismo partido por considerar que los planteamientos expresados en su nuevo libro son una “declaración de amor”[2] para con el partido de ultraderecha AfD (Alternative für Deutschland) y una afrenta directa a los votantes de Die Linke que, a juicio de Wagenknecht y como explicaremos en este artículo, construyen su identidad y praxis política a partir de un tipo específico de consumo privilegiado, nombrado por la autora como izquierda-del-estilo de vida (Lifestyle-Linke)[3].
Leer más